¿Cómo cuidar la salud de tus empleados durante una ola de calor?

A medida que aumenta la temperatura, llega el momento de asegurarse de que sus trabajadores estén protegidos ante padecimientos relacionados con el calor. Siga estos nueve consejos para reducir el estrés por calor en el lugar de trabajo.

La exposición al calor es un problema de salud potencial para los trabajadores tanto de interior como de exterior. La gravedad del estrés por calor puede variar desde una sed intensa hasta una sensación de debilidad y agotamiento, o incluso un golpe de calor descontrolado y la muerte si no se toman las precauciones adecuadas a través de la educación y la prevención.

El estrés por calor ocurre cuando los medios del cuerpo para controlar su temperatura interna comienzan a fallar. En muchos trabajos, el estrés por calor es un problema durante todo el año, pero durante los calurosos meses de verano puede haber un mayor riesgo, especialmente para los empleados que trabajan al aire libre.

Cómo prevenir el estrés por calor

Prevenir el estrés por calor implica evaluar las condiciones de trabajo con factores de riesgo clave que incluyen la temperatura del aire, la tasa de trabajo, la humedad y la ropa de trabajo.

Es recomendable buscar el consejo de un profesional de la salud ocupacional para evaluar la sensibilidad y susceptibilidad de una persona al estrés por calor. Los factores de riesgo incluyen la edad, el peso, la condición física, el metabolismo, el uso de drogas o alcohol y diversas afecciones médicas. Por ejemplo, una persona mayor tiene un metabolismo reducido y generalmente tiene una menor tolerancia al estrés por calor; de igual manera que las mujeres embarazadas y las personas obesas también tienen una menor tolerancia al calor.

Se pueden tomar estos nueve consejos para ayudar a reducir el riesgo de estrés por calor en el lugar de trabajo:

1. Establecer un programa de prevención de enfermedades causadas por el calor.
Incluya prácticas de trabajo seguras y procedimientos de emergencia. Defina un entorno seguro (temperatura y humedad) y especifique cuánto tiempo se puede trabajar en un entorno caluroso.
2. Proporcionar educación y formación
Asegúrese de que sus trabajadores sean conscientes de los riesgos del estrés por calor asociados con su trabajo y que comprendan los síntomas que deben tener en cuenta.
3. Permita que los trabajadores se aclimaten
Aumente gradualmente la carga de trabajo y la exposición al calor. Identifique qué trabajadores están aclimatados o evaluados como aptos para trabajar en condiciones de calor.
4. Reducir la exposición a ambientes calurosos
Diseñe horarios de trabajo según el clima, programado para las horas más frescas del día le trabajo más extenuante.
5. Aumenta la circulación de aire
Utilice ventiladores, aire acondicionado y ventilación para bajar las temperaturas; y estructuras físicas que reducen la exposición al calor radiante o crean sombra.
6. Vigilar la salud de los trabajadores
Identifique aquellos que están en mayor riesgo de sufrir estrés por calor debido a la naturaleza de su trabajo o debido a una enfermedad, condición o medicamento.
7. Prevenir la deshidratación
Proporcione agua fresca y anime a los trabajadores a beber cada 15 a 20 minutos, tengan sed o no, durante el clima cálido. Evite la cafeína y el alcohol.
8. Proporcione descansos frecuentes
En los días más calurosos, proporcione descansos cada hora con acceso a áreas frescas a la sombra o en un edificio o vehículo con aire acondicionado.
9. Proporcionar ropa adecuada
Los trabajadores externos deben usar ropa ligera y holgada, anteojos de sol y protector solar. Tenga en cuenta que el equipo de protección puede aumentar el riesgo de estrés por calor y proporcionar más descansos para estos empleados.